domingo, 19 de junio de 2016

Música y afición


Me llama mucho la atención que los cordobeses acudan a La noche blanca del flamenco cuando el ambiente cultural de la ciudad es mínimo. La Orquesta de Córdoba languidece temporada tras temporada (en el magnífico concierto de despedida de la temporada del pasado viernes había poco más de media entrada en el teatro), el festival de la guitarra sólo llena cuando vienen grandes figuras del rock internacional y las actuaciones o edición de trabajos discográficos relacionadas con el flamenco es inexistente.